#FilbaRecomienda | Amalia Sanz, Directora de Filba
Mi juventud unida, es el título que reúne la poesía de Mariano Blatt. Juventud Unida, casi el nombre de un sindicato de trabajadores organizados para defender intereses y derechos en común. La unión –de poemas y de postales de una misma época- hace la fuerza, pero este sindicato no es uno de poetas, ni de escritores ni de editores -todo lo que podría ser y de hecho es Mariano Blatt- sino más bien uno de jóvenes que caminan despreocupados por escenografías urbanas y conurbanas, en tardes de verano, de porro, de sexo y de amigos. Jóvenes habitantes de un mundo liviano, de pura vitalidad, en el que se espera en la estación de tren con los auriculares puestos, al sol (mejor, al solcito, esa referencia insistente y reconocible en los versos), con la cadencia del que no está apurado porque no tiene adónde ir. O tal vez sí, pero es el que viaja para encontrar en la deriva otra estación y seguir el camino.
El procedimiento puede ser engañoso porque en esa liviandad de días larguísimos, pibes lindos y birras no hay ausencia de discurso político, como irrumpe, por ejemplo, en el mantra poderoso que componen las líneas repetidas del poema “Diego Bonnefoi”, en homenaje al pibe de 15 años asesinado por la policía en Bariloche en 2010.
Lo más lindo de los poemas de Mariano Blatt es la respiración con la que él nos obliga leerlos. Alguna vez, Blatt dijo que escribe en voz alta en silencio. Y es una imagen descriptiva perfecta, trasladable a la escena de lectura: lo leemos en voz alta en silencio. La voz de Blatt suena y la seguimos adentro nuestro a través de las más de 400 páginas del libro.
Al final, los poemas infinitos –dos unidades inestables y siempre abiertas que Blatt dice que va a seguir escribiendo hasta que se muera- cierran un libro que siempre va a tener una línea más. Por suerte.
Esos son más o menos los recuerdos que tengo
y los escribo acá porque que yo sepa
la poesía, lo que se dice la poesía,
sólo es posible cuando te falta algo
o cuando algo se te está por escapar.
(Final lindísimo del poema “Cuando todavía no había celular”. Acá en la voz de Mariano)
Click acá para disfrutar el show que hizo Blatt con Julieta Venegas en Filba 2018.
Soundtrack completo de The field inspirado en “Al solcito en el furgón”
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Amalia Sanz trabaja en la programación de los festivales Filba desde el comienzo de los tiempos de la Fundación, que ahora dirige.
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